jueves, 22 de mayo de 2008
Gravity
Hubo un tiempo, donde perdido en el bosque brillabas
como el sol.
Pálido, hambriento,
te encontraste con la muerte
y ella siempre tan clara, tan limpia, decidió hacerte justicia.
En el momento exacto.
En el lugar exacto.
Entonces, volviste a nacer en los ojos de los otros,
estuviste en mil países
y millones de bocas pronunciaron tu nombre.
Como un conjuro.
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